REFLEXIÓN

Puede que la jornada partida sea un distintivo de España (no sólo de pinchos de tortillas viven hombres y mujeres en esta tierra). Protestas obvias y gran coñazo, aquí va otra crítica que no se me había ocurrido..."En todo el mundo los empleados y escolares salen del hogar para llegar a su trabajo o aula una vez al día y regresan a sus casas una vez al día. Menos en España. Aquí, en tiempos de una crisis mundial sin precedentes y con gobiernos en pos de alternativas al petróleo (biofuel, energía solar, eólica, nuclear...), seguimos gastando el doble por culpa de una costumbre que casi temo abordar: la jornada partida..." (de las cartas al lector de la Vanguardia