debatíamos en los pasillos de la facultad
reforma o revolución
en mis 20, la respuesta era clara: revolución
llegó la época de escribir sobre argentina
y empezaron las dudas: ¿cómo analizar la crisis del 2001?
¿estructura - sistema - instituciones - partidos - individuos?
la respuesta clara empezaba a tambalearse
no conseguía una posición de fuerza (metodológica)
desde la que mirar la realidad
(ni para el diagnóstico ni para la propuesta)
finalmente,
vuelvo a preguntarme:
reforma o revolución
y es que en mis 30, algo cambia
me he vuelto pragmática
me he vuelto ¿realista?
creo en otras revoluciones
las propias, las del día a día, las de cada un@
no hay revolución a lo grande,
sin revoluciones a lo pequeño
y sin embargo, estos días,
viendo las noticias de islandia y de grecia
me sorprendo y "me" dudo
2 comentarios:
(eventos, para distinguir).
Revolución sin duda, pero revolución interior, revolución personal, revolución de cada un@.
Menos egos, menos egoísmos, menos personalismos, menos como aprovecharme de las cosas, más escuchar al otro (algo que día a día aprendo en la plaza), menos prejuicios, más dudas, menos certezas, menos ver la realidad con certezas.
La sociedad, la política, la economía que tenemos sólo son el reflejo de lo que somos y de cómo nos relacionamos.
Como ejemplo, si existiera solidaridad y una buena red social que cuando tuviéramos dificultades económicas nos amparara o cuando tenemos un buen proyecto para desarrollar nos colaborara, los bancos no tendrían sentido.
Si nadie quiere ser más que nadie, ni habría casos de corrupción ni intentaría vender mi piso 50.000 euros más caro que mi vecino.
Si escuchamos a todo el mundo, no haría falta una reforma de la Ley electoral, votaríamos en función de lo que dicen y hacen y no cómo si fuera mi equipo de fútbol.
Conseguir eso es una revolución, reformando leyes, si no cambiamos nosotr@s, no cambia nada.
taaaaaaaan de acuerdo...
seguiremos aprendiendo!
e intentando poco-a-poco
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